Carlos Pujol(1936), escritor, traductor y editor, murió, la noche del 16 de enero, como vivió, del modo más discreto, de un derrame cerebral. Doctor en Filología Románica (1962), inició su carrera en la enseñanza hasta 1977 cuando dejó su plaza de profesor de literatura francesa en la Universidad de Barcelona. No se sentía cómodo, hablar en público le inquietaba, lo que explica su salto a Planeta donde había publicado estudios sobre Voltaire (1973), y Balzac, Balzac y La comedia humana, (1974). Serían el inicio de una docena de ensayos más, entre los que destacan Leer a Saint-Simon, (1979) o 1900, fin de siglo, (1987). Cargado de una inmensa cultura al estilo de su adorada Ilustracción, de una exigencia altísima hacia sí mismo, era una enciclopedia en la sombra. Tan tímido como irónico reuhía la vida pública, por ello y por su afán de documentación pudo escribir cerca de 90 libros. Más de la mitad de su bibliografía se la llevan sus traducciones, en especial del francés donde volcó en su castellano, pulcro y parco, obras de Balzac, Sthendal, Baudelaire, Tournier y Simenon. "Tenía una gran finura moral e intelectual ; no sobreactuaba nunca, y en la amistad fué infalible". Así lo define su amigo, el poeta Pere Gimferrer. La discreción del sabio.
Carles Geli, obituario de El País, miércoles 18 de enero de 2012.
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