sábado, 31 de octubre de 2020

Noche de tinieblas y tristeza en Niza

La iglesia de Notre Dame en Niza
Uno desayuna tranquilamente con un amigo el café y el cruasán de cada día, la rutina cotidiana, e ignora que, esta será la última vez, que la muerte irrumpirá a los pocos minutos y la vida cambiará para siempre. "¿Cómo pensar que algo así pueda ocurrir aquí?", dice Jean-François Gourdon, tesorero de la basílica de Notre-Dame en Niza. "Nunca, nunca, nunca", añade. 

A las ocho de la mañana Gourdon desayunó, en un café cercano, como solía, con el sacristán de la basílica, Vincent Locquès. Juntos abrieron las puertas el templo y se despidieron. Antes de marcharse, Gourdon le dijo a Locquès:"Te veo a las seis de la tarde". Era la hora de la misa. Unos minutos después de despedirse un hombre entró con cuchillo  en el templo y mató a Locquès y a dos mujeres que en aquel momento rezaban en el interior. Hacía diez minutos que Gourdon se había marchado. Escuchó las sirenas y deshizo el camino. La iglesia ya estaba acordonada. "Ví un cadáver en el atrio", recuerda horas más tarde, mientras anochece y la catedral sigue acordonada. "Enseguida comprendí que era él".

Niza es una ciudad curtida, los atentados no son algo nuevo para sus habitantes, pero el estupor y la rabia después de cada ataque no desaparecen. Los recuerdos se amontonan en esta ciudad encajonada entre las últimas estribaciones de los Alpes y el Mediterráneo, ciudad triplemente golpeada por el terrorismo, como recordó unas horas antes ante la catedral el presidente Emmanuel Macron.

El 3 de febrero de 2015, un delincuente radicalizado atacó con un cuchillo a tres militares que vigilaban un centro comunitario judío, cerca de Notre-Dame. Y el 14 de julio de 2016, un terrorista al volante de un camión mató a 86 personas en el paseo de los Ingleses, donde habían acudido para ver los fuegos artificiales de la Fiesta Nacional.

"¿Por qué Niza?" "¿Por qué siempre eligen Niza?", se pregunta a gritos frente a Notre-Dame Houfrane Aaki, una mujer originaria de las islas Comoras y musulmana que había convocado a un minuto de silencio, una vigilia ecuménica en la que se mezclaban paseantes y periodistas . "Este tipo no era musulmán, era un sinvergüenza", dice aludiendo al terrorista. "¡Stop! Quienes tengan ganas de matar que vayan a su país a hacerlo", dice mientras su tono de voz, cada vez más alto, atrae a la multitud, hasta que la entrevista con este corresponsal acaba por convertirse en un pequeño mitin... 

Marc Bassets. Niza. El País, viernes 30 de octubre de 2020

 

viernes, 30 de octubre de 2020

William Christie danza con Beethoven

La Orquesta Nacional sigue con su temporada Beethoven. Los días 16,17,18 de este mes la música del genial compositor ocupa la totalidad de un programa sin descanso por la situación sanitaria. Lo que se anuncia es de interés, ya que los atriles estarán ocupados por dos obras de escasa presencia entre nosotros, aunque no figuren ni mucho menos en el catálogo de las desconocidas. El ballet Las criaturas de Prometeo es una partitura larga, premiosa a ratos pero que posee un envergadura indudable y unos valores melódicos y rítmicos de primer orden. Nació como consecuencia del encuentro en 1.800 del músico y el coreógrafo Viganò, bailarín y escenógrafo napolitano...

Lo más sustancioso de la velada lo constituye la Misa en Do mayor op. 86, "la otra Misa". Ya sabemos que la más notoria es gigantesca Misa Solemnis, palabras muy mayores, aunque la que se va a escuchar no tenga nada que despreciar...

Para vestir estas dos composiciones y llevarlas a buen puerto se cuenta con la indiscutible autoridad en este tipo de repertorio, situado entre el barroco y el clasicismo que mira al futuro, del franco-americano Willian Christie, que ya se ha situado más de una vez al frente de los conjuntos estatales. Su peculiar manera de marcar -por supuesto, sin batuta-, su movilidad al compás de la música, su contagioso impulso de aire  eternamente danzable, su animación -pese a que  ya no cumple los 75-, esperemos que se aclimaten de la mejor manera a los modos de la OCNE, que seguramente actuará algo reducida buscando la mayor autenticidad  y respetando las normas fijadas por Sanidad...

Christie se trae a cuatro solistas, tres de ellos pertenecientes a su famoso Jardin des Voix, en el que los cantantes, a veces son solo meras promesas, se hacen y van ganando en experiencia. Voces jóvenes y prometedoras  que ya han experimentado en algún caso las mieles del éxito...

Arturo Reverter. El Cultural, 16 de octubre de 2020.

  

jueves, 29 de octubre de 2020

Houellebecq, autorretrato del dandi reaccionario

Michel Houellebecq dice adiós. Que no se asusten los fans. No dejará de escribir novelas, esas precisas ra-diografías de su tiempo, como en el siglo XIX lo fueron las de Balzac o Zola, y que le ha consagrado como uno de los indispensables de la literatura francesa, aclamado por crítica y público, galardonado con el Goncourt y condecorado por el presidente Macron con la Legión de Honor.

El autor de Plataforma, El mapa y el territorio o Serotonina dejará, eso sí, de "comunicar pensamientos y opiniones en público". Lo anuncia en la contraportada de Interventions 2020, el volumen de 450 páginas que acaba de sacar la editorial Flammarion en francés y que reúne entrevistas, artículos y ensayos de los últimos 28 años, en parte publicados en libros anteriores. Solo intervendrá de nuevo, añade, "en caso de urgencia moral grave, por ejemplo, una legislación de la eutanasia".

Houellebecq, de 64 años, es un reaccionario que no lo esconde, un dandi adicto a la provocación con opiniones que, si no fuese quien es, posiblemente no sería de recibo en los mismos salones de París, de Londres o Nueva York que le aplauden. Cosas de Michel... El periodista Laurent Joffrin  le trató una vez de "beauf"/cuñado: el tipo que prefiere opiniones banales sobre lo divino y humano, sin conocimiento y con osadía. Y algo hay de esto en Interventions 2020, título que imita, o parodia, las antologías ensayísticas de Jean Paul Sartre, tituladas Situaciones, o de Albert Camus, Actuales. El escritor elogia a Donald Trump carga contra la Unión Europea. Despotrica contra el feminismo. Defiende la prostitución. Y formula una particular teoría sobre la pedofilia. Puro Houellebecq. Entre la provocación o la frivolidad, o el humor. Entre la literatura perdurable y la brocha gorda. Entre la pose estética y la doctrina ultra. Entre el dandi y el "beauf". El nuevo libro ofrece el mapa más preciso del territorio ideológico del escritor cuya obra ha publicado en castellano la editorial Anagrama...

¿Habla el personaje? ¿El hombre? ¿Es un escritor político? ¿Un esteta?. En Interventions 2020, Houellebecq deja la marca de su excentricidad y sus humores. Pero también teoriza -con menos destreza que en sus ficciones: no es un ensayista sofisticado- los miedos profundos de la sociedad francesa: Le Pen sacó más de 10 millones de votos en las elecciones presidenciales. Al mismo tiempo, él encarna el último eslabón de una serie de nombres -de Maurras a Céline o, en el bando opuesto, los adoradores de Stalin o Mao- que brillaron como escritores y abrazaron ideologías extremas.

También en eso, Houellebecq es muy francés.

Marc Bassets. París, martes 13 de octubre de 2020

miércoles, 28 de octubre de 2020

Nobel de Química para las dos creadoras de la edición del genoma

Emmanuelle Charpentier y Jennnifer Doudna. 
Foto Reuters
La francesa Emmanuelle Charpentier y la estadounidense Jennnifer Doudna han ganado el premio Nobel de Química 2020 "por el desarrollo de un método para la edición genómica", según anunció ayer la Real Academia de Ciencias Sueca. Ambas investigadoras reciben el galardón por desarrollar la técnica de edición genómica CRISPR/Cas9 que funciona como unas tijeras moleculares que permiten localizar cualquier secuencia del código genético de cualquier animal, planta o  microbio (CRISPR) y cortarlo (Cas9).
Esta tecnología ha sido "revolucionaria" para las ciencias de la vida, está contribuyendo a desarrollar nuevas terapias contra el cáncer y puede hacer realidad la cura de muchas enfermedades hereditarias de origen genético, destacó la Academia.
La técnica da de los humanos por primera vez la capacidad de dirigir la evolución de su especie según explica Doudna (Washington, 1964) en su libro Una Grieta en la Creación (Alianza). El CRISPR ha permitido comenzar a desarrollar curas para enfermedades humanas originadas en mutaciones de un solo gen, pero también tiene un reverso oscuro . En 2018, la técnica CRISPR permitió la creación de los primeros bebés humanos editados genéticamente por el científico chino He- Jiankui en un experimento delirante por el que ha sido condenado a tres años de cárcel.
Hace tan sólo unas semanas un comité internacional de científicos alertaba de que aunque CRISPR es una técnica "todavía" insegura, la edición genética legal de los seres humanos en determinadas circunstancias es quizás inminente...

Nuño Domínguez. Madrid. El País, 8 de octubre de 2020. 
   

martes, 27 de octubre de 2020

La "versión disidente" de Monet firmada por Bansky

El lienzo Show me the Monet de Bansky
El lienzo  Show me the Monet/Muéstrame el Monet,  re-interpretación de una de las obras  maestras del impresionismo del francés Claude Monet elaborada por el enigmático artista Banksy, ha sido subastado  por Sottheby´s en Londres por 8,3 millones de euros.

La casa de subastas considera la pieza como "una versión disidente" de Monet. Con esa obra Banksy "arroja luz sobre la indiferencia de la sociedad hacia el medioambiente y a favor de excesos derrochadores de consumismo", ha señalado el experto de Sotheby´s Alex Branczik en un comunicado.

Esta "versión disidente", tal como la describe la casa de subastas, reproduce el idílico escenario del Puente Japonés del pintor francés, si bien el artista callejero agrega al conjunto un carro de la compra volcado y un cono de circulación semisumergido en las aguas del plácido estanque original.

Show me the Monet pertenece a una serie que Banksy ha denominado "remixe" de obras de arte canónicas. El artista callejero toma el lenguaje de la historia del arte  y lo subvierte, creando piezas con su propio estilo. Así lo ha hecho con los Girasoles, de Van Gogh, que él pinta marchitos,  o con Marilyn Monroe de Andy Warhol, que convierte en Kate Moss.

El trabajo fue la estrella de la subasta virtual dirigida ayer desde Londres dedicada al arte moderno y contemporáneo en la sala londinense, de acuerdo con Efe. 

Show me the Monet fue expuesto en público por primera vez hace 15 años como parte de la segunda muestra que dedicaba a Banksy la galería Whitewall de la capital británica, una exposición que atrajo tanto al público como a los medios de comunicación. En aquella ocasión, los visitantes tenían que compartir el espacio con 164 ratas que Banksy se había encargado de soltar en la galería.

El lienzo estuvo a punto de rebasar el récord de venta del artista, de la venta de Devolved Parliament/Parlamento transferido, pintada en 2009 por Banksy, que fue subastada por la astronómica cifra de once millones de euros.

ABC, 23/10/2020


lunes, 26 de octubre de 2020

Problemas del corazón

Woody Allen, W. Shawn y Elena Anaya durante el rodaje.

Los más veteranos recordarán a Wallace Shawn por la La princesa prometida y los recién llegados lo reconocerán como el profesor Sturgis de El joven Sheldon. Entre uno y otro título, el magnífico actor de carácter logró un protagonista inolvidable, amargado personaje chejoviano en Vania en la calle 42.

Shawn debutó en el cine con una película de Woody Allen, Manhattan, y desde entonces ha trabajado en otras cinco ocasiones para el "judío de Brooklyn". Ahora, Allen le oferta al pequeño gran actor una magnífica ocasión para lucir su gestualidad única, encarnando a un Woody octogenario y torpe, viejo soñador perdido en un vagabundeo errático, durante unos leves días en San Sebastián.

El festival de Donosti es el marco de Rifkin's Festival, otra pequeña y deliciosa farsa pirandelliana de Allen, donde un profesor de historia del cine, que quiere escribir la gran novela americana - a la altura de Miguel Ángel, Joyce o Fellini-, pasa unos días de asueto, acompañando a su esposa, agente de prensa de un joven y pretencioso director francés que está de moda y que conoce las mieles del éxito. Mientras su mujer se lía con el galo, el hipocondríaco protagonista se enamora de la joven doctora española que lo trata, y así los falsos problemas de su corazón sano pasan a ser reales problemas del loco corazón. Porque "el corazón no atiende a razones".

Shawn lo es todo en esta película encantadora que, como muchas de las últimas de Allen, está disfrazada de filme menor, de cinta acomodaticia de transición a la senectud. Pero no, no nos dejemos engañar, la fuerza del guion, construido como ya no se construyen, y la ligereza clásica de la narración nos llevan en volandas, acompañando los devaneos sentimentales de este Sísifo otoñal. Y el pequeño gran Wallace con su físico de tortuga renqueeante, empuja la piedra del castigo, cuesta arriba, con la constancia de un joven viejo...

Eduardo Galán Blanco. La Voz de Galicia, miércoles 7 de octubre de 2020   


domingo, 25 de octubre de 2020

Marsella radiante y circular

La bienal nómada Manifiesta 13 en Marsella

En Marsella, nación de Zinedine Zidane ("primero soy marsellés, después francés y argelino") y también de Walter Benjamin que pasó allí las últimas semanas de su existencia  -por citar solo dos personalidades que han influido en la cultura de masas-, se está gestando el laboratorio de los conmonautas, la futura ciudad ecológica de 26 siglos de historia, la más antigua de Francia y la más fragmentada (divida en 111 entidades administrativas), con un tercio de población argelina y hoy agobiada por las restricciones del confinamiento. Tiene casi tantas ratas por habitante como Nueva York o París, se las ve tan campantes en las calles bordeadas por hermosos y escuetos edificios con las contraventanas cerradas a cal y canto. Son propiedad de fondos de inversión (otras ratas) en una ciudad con gravísimos problemas de vivienda. Con todo, Marsella exhibe una energía descomunal, y prueba de ello es el cambio de su Gobierno, Michèle Rubirola es la nueva alcaldesa verde y a ello se añade ahora en alienación astral, la bienal itinerante Manifiesta, hoy por hoy una de las pocas citas artísticas que parecen tener futuro tras la debacle cultural ocasionada por la pandemia.

Inaugurada ayer contra todo pronóstico, su 13ª edición incluye tres programas: Traits d'union.s (seis sedes, 48 artistas y colectivos), Le Tiers Programme (archivos) y Les Parallèles du Sud (86 proyectos en toda la región), y está conducida por los comisarios Katerina Chuchalina, Stefan Kalmar y Alya Sebti. Además de las exposiciones e intervenciones en sus distintas sedes, suma el el proyecto urbanístico Le Grand Puzzle, dirigido por los holandeses MVRDV y The Why Factory, un estudio del nivel de "sostenibilidad" que podría alcanzar la urbe en pocos años si brotaran las "semillas del tiempo"(Fredric Jamenson), es decir la capacidad de sus habitantes de imaginar o fantasear sobre un futuro perfecto posible.

El evento artístico es abarcable y cose espacios de música y danza, galerías non profit, museos y colecciones en los barrios de Belsunce, Bourse/Noailles (Museo de Historia de Marsella), Opéra (Conservatorio, Museo Cantini), el Puerto, Le Panier (Casa de la Caridad) y Parc Longchamp, un pulmón construido en el XIX para aprovisionar de agua a la ciudad tras las pestes, con sus fuentes que conectan dos museos, Bellas Artes e Historia Natural, y un zoo sin bestias reales. En su lugar hay figuras de animales a escala real, cada uno emitiendo los sonidos de su especie. Como estar dentro de un libro infantil desplegable...

Ángela Molina. Babelia. El País, 10 de octubre de 2020

sábado, 24 de octubre de 2020

Clementinas corsas

¿Saturado de cifras de contagios y muertes por el Covid? ¿Harto de bronca política? Déjese llevar de paseo por la cuadrilla a Córcega. En la isla mediterránea este híbrido de mandarinas y naranjo verde debe su nombre al hermano Clemente, el fraile que hizo su primer injerto en un orfelinato de Orán (Argelia) cuyo huerto estaba a su cargo. Se diferencia de la mandarina en que no tiene pepitas.

A las fruterías de París ya han llegado las más tempranas. De Portugal a 3,90 E el kilo y de España, más hermosas y caras (5,90/Kg). Mi frutero me asegura que bajarán mucho  en cuanto avance la temporada. El 98% de las clementinas de la Francia metropolitana procede de Córcega donde se producen entre 20 y 30.000 toneladas que suponen unos 50 millones de ingresos anuales.

La cosecha de 2020 ha sido noticia antes de empezar por culpa ...del Covid. Cerradas a cal y canto las fronteras de la UE, los productores se han unido para montar un puente aéreo que traslada a 902 marroquíes en cinco vuelos charters. La Oficina de  la Inmigración, la prefectura y el Centro de crisis de la oficina del primer ministro francés han firmado con las autoridades marroquíes un protocolo sanitario y diplomático excepcional.

Las redes sociales se han agitado en la isla acusando a los empresarios de favorecer los contagios. El prefecto, François Ravier, ha salido al paso: "Se harán test a los temporeros en Marruecos antes de la salida, a los siete días de su llegada y antes de su marcha. Se han reforzado los controles sobre sus condiciones laborales y de alojamiento". Además los traslados a las huertas están compartimentados. Y en caso de contagio, los afectados pasarán la cuarentena en cámpings.

Los vuelos de ida y vuelta costarán unos 600.000 euros a pagar entre los 72 productores corsos de clementinas  (de un total de 145) que necesitan mano de obra externa. Las autoridades locales de la isla, los siempre vocingleros nacionalistas corsos, no han dicho ni mú.

Loa alemanes ya usaron en primavera el mismo procedimiento para importar trabajadores rumanos en la cosecha del espárrago. Seguramente en España hay algún ejemplo similar que ignoro. Si recuerdo los brotes de covid de fines de mayo en Huesca y Lérida propiciados por las malas condiciones de acogida de los temporeros.

Frente a la pandemia sobra bronca y estadística. Y falta ir al detalle y hacer las cosas bien. Y humildad para copiar lo que otros hacen mejor.

Iñaki Gil. El  Mundo, lunes 12 de octubre de 2020.


viernes, 23 de octubre de 2020

El Monopoly anticapitalista

En sus orígenes a principios del siglo XX, el Monopoly era una crítica a la especulación con las propiedades y a la acumulación de riqueza. Pero el paso del tiempo fue diluyendo su mensaje y se convirtió en un inocente juego de mesa con el que pasar la tarde dejando en bancarrota a amigos y familiares. En el caso del juego Kapital!, publicado por la editorial La Ville brûle, que ha vendido más de 25.000 copias en Francia, es difícil que el mensaje anticapitalista se diluya. Su subtítulo es bien claro: "¿Quién ganará la guerra de clases?". El juego que se presenta en una caja rojo intenso, ha sido creado por la pareja de sociólogos Monique y Michel Pinçon-Charlot, que han dedicado su carrera al estudio de la desigualdad, las relaciones de clase y al estilo de vida de los ricos en sus propios ámbitos, las villas, los clubs privados, los viñedos o los castillos.  "Creamos este juego de mesa como una forma de entender las desigualdades sociales y económicas que se han vuelto enormes e inaceptables", dicen desde París. A juicio de estos estudiosos, la "lucha" de clases se ha transformado en una verdadera guerra en la Francia de Emmanuel Macron y el juego va en perfecta consonancia con los tiempos en los que vivimos. En Kapital!, el que dicen ser el primer juego de "sociología crítica", a uno le toca ser dominador o dominado según decida el azar de los dados y su objetivo es acumular el máximo de riqueza y llegar al ansiado "paraíso fiscal" que culmina el juego...

Sergi C. Fanjul. Madrid. El País, 8 de octubre de 2020.

jueves, 22 de octubre de 2020

El enigma de los sueños

Roger Caillois

Cofundador del Collège de Sociologie junto a Georges Bataille y Michel Leiris, el escritor, traductor, editor  y sociólogo francés Roger Caillois (Reims 1913-París1978) dejó una abundante producción teórica, aunque no ha logrado penetrar en España los niveles de popularidad que alcanzó en su país natal y Argentina donde residió parte de su vida y se relacionó con la intelectualidad, especialmente vinculada a la mítica revista Sur, impulsada por la escritora Victoria Ocampo. Se le ignora pese a que esa estancia latinoamericana lo convirtió en introductor en Francia de la literatura de Jorge Luis Borges -ejerció además como traductor- y creó en el sello Gallimard la colección La Croix du Sud, que acogió a muchos de los más ilustres escritores hispanoamericanos del siglo XX.

Caillois fue un ensayista de mirada profunda y largo aliento que abordó asuntos como el sueño, el juego, los mitos, la estética, lo sagrado, las máscaras, el poder, la poesía, la soledad contemporánea, el demonio... Pero también dejo dos obras que han cobrado dimensiones legendarias y gran eco entre los lectores más informados: la Antología del cuento fantástico (1958-1966) y Poder del sueño. Relatos antiguos y modernos (1962).

Es una vieja empresa largamente acariciada por Jacobo Siruela editar el primero de los títulos, aplazada una y otra vez por problemas de derechos, tanto que se propuso editar la suya propia; y así fue: Antología universal del relato fantástico (Atalanta, 2013)...

Poder del sueño. Relatos antiguos y modernos -publicado por el Club Français du livre bajo la tutela de Caillois- llega hoy a las librerías para gozo del lector, que podrá comprobar en su exquista colección de textos literarios cómo el ser humano -más allá de su procedencia y su cultura- siempre se ha sentido cautivado por los sueños y por el misterioso poder y el enigmático significado de sus imágenes.

H.J. Porto. La voz de Galicia, miércoles 30 de septiembre de 2020


miércoles, 21 de octubre de 2020

El padre, el predicador y el joven terrorista

Ni dos semanas: 11 días bastaron para que un incidente en un aula de una escuela secundaria cerca de París acabase en la decapitación de un profesor, un atentado que recuerda a Francia, después de casi una década que ha dejado  cerca de 300 muertos, que la amenaza del terrorismo islamista sigue ahí presente.

Esta es la historia de una campaña de odio que se inicia con un padre que se declara indignado porque supuestamente su hija era víctima de la islamofobia; se da a conocer con la ayuda de un predicador fichado por los servicios de seguridad que le ayudó  a agitar una campaña en las redes y termina con un refugiado  de origen checheno de 18 años que, inspirado por la polémica, decide dar un paso más y asesinar al docente.  

Todo empezó el lunes 5 de octubre, cuando Samuel Paty, profesor de Historia y Geografía de 47 años, dedica la hora de educación cívica a hablar a los alumnos de la libertad de expresión. Para ello muestra dos de las caricaturas de Mahoma publicadas por el semanario satírico Charlie Hebdo. En una de ellas se ve al profeta desnudo. Antes de empezar la clase , Paty, extremando la cautela y con ánimo de no herir sensibilidades, dice a los alumnos que pueden renunciar a mirar los dibujos.

El día 7, el padre de una alumna de 13 años difunde en las redes sociales un video en el que llama a movilizarse contra el profesor, al que señala por su supuesta islamofobia. Al día siguiente, el padre acude ala escuela, el Collège du Bois -D'Aulne en Conflans-Saint-Honoré, al noroeste de París, para quejarse a la directora. Le acompaña el predicador radical Abdelhakim Sefriaoui. Ambos amenazan con organizar manifestaciones si el profesor no es despedido.

Lo que hasta entonces podía parecer el desacuerdo de un padre con los programas y métodos de la escuela pública y laica, está a punto de convertirse en un caso que agitará los círculos islamistas en la red... Cómo la campaña de acoso y derribo acabó dándole a Abdoulakh Anzorov la funesta idea de cortar la cabeza al profesor es lo que intentan aclarar los investigadores...El viernes 16 llegó por la tarde a la escuela armado con dos cuchillos y una pistola con balas de plástico....Cuando identificó a Paty, lo siguió unos metros y lo atacó con un cuchillo de 35 centímetros. Después de decapitarlo, hizo una fotografía y lanzó un mensaje en Twiter dirigido a Macron en el que se jactaba  de "haber ejecutado " a alguien que había "osado rebajar a Mahoma". Poco después, murió al recibir nueve disparos de la policía...

Marc Bassetts. El País, martes 20 de octubre de 2020.   

martes, 20 de octubre de 2020

Los Alucinados. Pierre-Louis Flouquet

Uno de los Retratos imaginarios de la exposición
/ Colección Roberto Polo

Más que una exposición de dibujos pareciera un cruce de  caminos entre el relato de terror, la historia de entreguerras y el psicologismo más tenebroso este desfile alucinado entre los muros de la Casa Zavala de Cuenca. Ahí arriba, asomados al barranco de la hoz del Júcar, viejos aristócratas venidos a menos, recios y rancios militares, abogados y jueces autoritarios, intransigentes beatos, pobres diablos sin fortuna, tres o cuatro mujeres resignadas y, en general, una cohorte de almas en pena se muestran al visitante para dar testimonio del tipo que les dio la vida: Pierre-Louis Flouquet, un vanguardista de los inicios del siglo XX, un pintor que dejó de pintar, un personaje con sus tinieblas y un artista, en suma, que decidió desaparecer de la circulación en la cresta de la ola. 

La exposición, Retratos imaginarios, 259 dibujos a tinta china, supone dos advenimientos. Por un lado, el del propio Flouquet en España: un artista prácticamente desconocido en este país pese a haber integrado junto a ilustres nombres como Kandinsky, Max Ernst, Paul Klee, Oskar Kokoscha o Servranckx el grupo generado a principios del siglo XX en torno a la revista berlinesa Der Sturm y la galería homónima fundada en 1912. Y por otro lado, el del coleccionista cubano-estadounidense Roberto Polo en Cuenca, donde a finales de octubre inaugurará la segunda sede (después de Toledo) de la CORPO-Colección Roberto Polo, Centro de Arte Moderno y Contemporáneo de Castilla-La Mancha.

Las obras de Pierre-Louis Flouquet fueron ejecutadas entre 1927 y 1931. Para entonces, su autor ya había abandonado prácticamente la pintura al óleo, un territorio en el que había destacado desde joven, con su amigo René Magritte como primer compañero de viaje. Nacido en París, en 1900, su familia se instaló en Bruselas en 1910. Cursó estudios en la Real Academia de Bellas Artes, pero estaba claro que la disciplina académica se antojaba un universo demasiado estrecho para el artista en ciernes, que empezó a relacionarse desde muy joven con los vanguardistas de Amberes, Berlín, Bruselas, Lausanna y París, hasta que en 1921 tomó parte en dos importantes citas: la Exposición Internaiconal de Arte Moderno de Ginebra y la exposición junto a Magritte en el Centre d'Art de Bruselas, convirtiéndose en responsable de la sección de pintura e ilustrador de su revista. Fue tan solo uno de los numerosos círculos y periódicos artísticos y literarios en cuya génesis tuvo que ver, como L'Assaut / El Asalto o el Journal de Poètes/ Diario de los poetas. Poco tardaría en adquirir relevancia en los círculos modernistas por sus abstracciones geométricas y sus composiciones biomórficas de corte surrealista. Fue uno de los máximos exponentes de lo que en aquella época del arte europeo se dio en llamar movimiento de la plástica pura.

Pero se cansó de pintar. De forma progresiva, la labor periodística en publicaciones belgas y francesas como ilustrador y como escritor pareció atraerle más. El grabado y el dibujo cobraron cada vez más relevancia en su obra, incluidos los retratos  de artistas y escritores célebres (Gide, Pirandello, Picasso, Matisse... o el que hizo de Unamuno para la portada de la revista Monde. Y en ese contexto nacen los personajes alucinados de Cuenca.

Estos 252 retratos imaginarios  -solo uno no lo es, el del pintor uruguayo Joaquín Torres García- son una selección de los cerca de 700 que posee Roberto Polo en su colección. Se cree que Flouquet llegó a dibujar más de 1.000. Se trata de piezas que nunca habían sido expuestas. Pasaron de los archivos personales de Flouquet, fallecido en 1967, a manos del historiador del arte Serge Goyens de Heusch (autor de la más completa monografía publicada sobre el artista) y de ahí directamente al coleccionista ahora afincado en Toledo...

Borja Hermoso. El País Semanal, 10-10-2020

lunes, 19 de octubre de 2020

"Je suis prof", el nuevo desafío de los franceses contra el terrorismo

Miles de franceses se concentraron este domingo por todo el país bajo el grito de "Je suis prof" para rechazar el terrorismo islámico tras la decapitación de un profesor de secundaria que había mostrado caricaturas de Mahoma en una clase de libertad de expresión.

Casi seis años después del "Je suis Charlie" con el que todo el país condenó el terrorismo islámico y defendió la libertad de expresión, Francia repitió hoy el grito de solidaridad con las víctimas y de reivindicación de los valores democráticos.

Las concentraciones fueron convocadas por organizaciones antiracistas y pacifistas -y apoyadas por Charlie Hebdo- para rendir homenaje a Samuel Paty, el profesor de Geografía e Historia de 47 años que fue decapitado el pasado viernes por un refugiado checheno de 18 años.

Un fuerte aplauso abrió a las 15.00 el acto en la Plaza de la Républica de París, el lugar donde se rechazó el atentado de 2015 contra el semanario satírico, pero también muchas manifestaciones de protestas de todo tipo. 

"Je suis prof" escrito en cartones era el slogan casi unánime de muchos asistentes, entre los que abundaban maestros y profesores para reivindicar la importancia de su profesión y defender la figura de la víctima y la necesidad del trabajo docente en la formación de los jóvenes en valores democráticos.

"Vengo a rendir homenaje a un compañero" afirmó simplemente a la prensa  uno de los profesores asistentes entre las miles de personas congregadas en París. Seguiré enseñando mi programa, No tengo miedo", declaró otra docente.

Equipados con la mascarilla que era condición imprescindible para que el acto fuera autorizado, los miles de asistentes al acto de París guardaron un minuto de silencio en señal de duelo por la víctima y cantaron La Marsellesa. 

Líderes políticos de todas las tendencias, entre los que destacaba el primer ministro Jean Castex, participaron a título privado en la concentración de París, a la que también asistieron musulmanes que denunciaban lo que uno de ellos definió como "barbarie islamista".

Las concentraciones se celebraron también en otras muchas ciudades del país, como Marseille, Lyon , o Lille.

El presidente francés Emmanuel Macron, encabezará a última hora de esta tarde una reunión  en la que podrían tomarse algunas nuevas  medidas contra el terrorismo islámico....

EFE. París, domingo 18 de octubre

domingo, 18 de octubre de 2020

Carrère, la venganza de la realidad

Emmanuel Carrère

La receta es infalible: cuando se mezclan la realidad y la ficción, la vida íntima y el relato público, hay un riesgo elevado de que salten las chispas. Le ha ocurrido a Emmanuel Carrère, escritor acostumbrado a manejar ese material explosivo, el de las personas en carne y hueso convertidas en personajes de papel. Su último libro, Yoga, recién publicado en Francia con éxito de público y crítica, ha abierto una batalla son su exmujer, la periodista Hélène Devynck, que le acusa de haberla engañado a ella y a los lectores. Carrère lo niega.

La disputa es uno de esos culebrones sin los cuales la vida literaria francesa no sería lo que es. Pero es más que eso: un debate sobre los límites de la literatura sin ficción, sobre el poder del escritor para vampirizar vidas ajenas y sobre la capacidad de los personajes para modelar, o censurar, obras literarias.

"Emmanuel y yo estamos atados por un contrato que le obliga a obtener mi consentimiento para utilizarme en su obra. Yo no he consentido al texto tal como ha aparecido", explicó Devynck en una carta publicada en la revista Vanity Fair. "Durante los años que vivimos juntos, Emmanuel podía utilizar mis palabras, mis ideas, sumergirse n mis duelos, mis penas, mi sexualidad". El divorcio de ambos en marzo, después de nueve años de matrimonio, lo cambió todo. Carrère perdió el derecho a usar a Devynck que, en efecto, aparece en Yoga, pero de una manera oblicua, por medio de una cita de un libro anterior de Carrère, De vidas ajenas (publicado en castellano, como toda su obra, por Anagrama).

A preguntas de El País, Carrère remitió a su respuesta publicada en la prensa francesa.  "Entiendo lo complicado que es para una persona real salir en un libro, pero también no salir en él",  replicó el viernes en una carta en Libération. "Todo lo que puedo observar es que, en los 20 años que llevo escribiendo este género de libros, ninguna de las personas se ha puesto en mi contra, ni siquiera Sophie, la heroína de Una novela rosa a quien, a ella sí, realmente ofendí, y todavía lo lamento".

El conflicto entre Carrère y Devynck exolica la elipsis -el inmenso vacío narrativo- que está en el núcleo de las casi 400 páginas de Yoga. El libro cuenta a vida del autor entre 2014 y 2019. Carrère, en primera persona y en el estilo confesional que cultiva desde que abandonó la ficción, relata su caída en una depresión profunda y el ingreso en un hospital psiquiátrico donde le aplicaron electroshocks...

Marc Bassets. París. El País, domingo 4 de octubre de 2020.

sábado, 17 de octubre de 2020

Optimismo en la Semana de la Moda de París

"No es el momento de preocuparse de lo comercial, sino de mostrar ideas nuevas y apostar por la fantasía, que es lo que necesitamos ahora que no sabemos qué nos espera". J. W. Anderson. Director creativo de Loewe, resume así el espíritu que ha definido la Semana de la Moda de París. La cita, que concluyó con la capital francesa en estado de alarma máxima por el coronavirus quiso ser una herramienta de evasión frente a la realidad.

Pero como en la pasarela milanesa, solo un 29% de las colecciones -Dior, Chanel, Hermès- se presentaron en un desfile tradicional con público. Si tiene sentido seguir insistiendo  en la fórmula presencial y las consecuencias de no hacerlo fueron los dos asuntos que monopolizaron las conversaciones más allá del alentador resurgir del mercado asiático y el nivel de unas propuestas concebidas durante el confinamiento, que tuvieron en Loewe y Paco Rabanne a sus mejores representantes.

Entre las marcas que optaron por un formato digital destacó la dirigida por Anderson. "Tengo muchos amigos que han sido afectados gravemente por la covid. No podemos estar donando dinero a la sanidad y, al mismo tiempo, formar parte del problema. Si una firma como Supreme ha conseguido situarse a ese nivel si hacer desfiles, creo que no pasa nada por que nos saltemos uno", explicó el director por videoconferencia...

También Hermès quiso subrayar su legado centenario y lanzar como explicaba su directora creativa, Nadège Vanhee-Cybulski, "un mensaje de optimismo, calma y belleza", traducido sobre la pasarela en camisas masculinas de corte perfecto, camisetas escotadas en la espalda y vestidos de líneas sencillas y acabados complejos..."Desfilamos porque podemos hacerlo y para mostrar que París es una ciudad llena de creatividad. No sólo lo hacemos por nosotros sino por toda la comunidad de la moda, que necesita de eventos físicos dentro de esta cita", argumentaba Vanhee-Cybulski.

Antes del coronavirus, la Semana de la Moda francesa dejaba en París unos 1.200 millones de euros en beneficios entre noches de hotel, desplazamientos, cenas y compras según un informe realizado por la Cámara Sindical de la Moda, la institución que organiza la cita.

Como motor industrial y reclamo turístico, la pasarela es, por extensión, fuente de empleo. Conservar el de los profesionales que hacen posible los desfiles fue una de las razones que llevó a Julien Dossena a mantener el show de Paco Rabanne: "No se trata solo de hacer dinero y olvidarnos de la gente de casting, producción y realización. Es un momento de celebración y con todas las medidas de seguridad a nuestro alcance queremos proyectar una imagen de fuerza"...

Tampoco Chanel, cuyo desfile fue durante años el más espectacular de la pasarela parisiense, quiso renunciar a la puesta en escena con público, aunque en esta ocasión redujo el aforo a una cuarta parte de lo habitual...

 En París, la moda no es accesoria sino fundamental y, al igual que la pasarela y las marcas que acoge, se enfrenta a un cambio de paradigma, cuyas consecuencias J.W. Anderson prevé drásticas. "La pandemia está actuando de acelerador", las cosas que no terminaban de funcionar van a desaparecer ya. Y esta especie de selección natural cambiará el sistema de la moda para siempre".

Carmen Mañana. París. El País, miércoles 7 de octubre de 2020.

viernes, 16 de octubre de 2020

Nakany Kanté, una travesía musical

Nakany Kanté

Más de 5.000 kilómetros separan Conackry, la capital de la República de Guinea, de Barcelona. Hace algo más de 10 años Nakany Kanté (nacida hace 30 en Siguiri, cerca de la frontera con Mali) hizo ese trayecto y se instaló en Sabadell. Dejó Guinea por amor, pero vivió el renacimiento del que habla la escritora senegalesa Fatou Diome:"Partir es tener el valor de parirse a sí misma, pues nacer de sí misma es el más legítimo de los nacimientos". Ahora el disco De Conackry a Barcelona rememora esa travesía y algo más: la trayectoria vital de Kanté de una década. "El álbum refleja la realidad de mis últimos años viajando de Guinea a Barcelona. Un viaje personal y musical", explica Kanté. Y resume lo aprendido en ese tiempo:"A hacer canciones, a trabajar con músicos de aquí y de allí, a crecer como persona y artista".

De aquí y de allá. O sea, de Barcelona y de Conackty. En las dos ciudades se ha grabado el álbum, donde las guitarras se enredan con la kora, los teclados, el balafón y la calabaza. Sonoridades del sur y del norte para una apuesta cantada casi en su totalidad en malinké (un continuo dialectal de África Occidental) que se  abre a golpe de afrobeat (Fadensawo) y se cierra con aires de soukous (La paix)...

Kanté editó su primer disco, Saramaya,  en 2014, y dos años después publicó Naka. Fueron grabaciones que le abrieron escenarios. De Conackry a Barcelona es una apuesta más sólida, la que puede darle el empujón definitivo. "Lo más destacado del álbum son las guitarras mandingas, que no tuve en los anteriores. El mensaje es el mismo, hablo de la mujer africana". 

Kanté no oculta la influencia de artistas subsaharianas en su trabajo: desde sus compatriotas Djeli Kani Fanta Diabate, Diamounou Condé a la maliense  Oumou Sangaré. Aunque se nota la diferencia de popularidad fuera de África, entre las cantes guineanas y las de otros países como Malí. "Malí cuida su cultura y trata bien a sus artistas. En Guinea hubo un tiempo de esplendor con Sékou Touré (presidente desde 1958, año de la independencia, hasta su muerte en 1984), pero después todo se paró"...

Javier Losilla. Zaragoza. El País, martes 6 de octubre de 2020.


jueves, 15 de octubre de 2020

La servidumbre voluntaria

                                  Étienne de La Boétie
Aún si no hubiese Étienne de la Boétie (Sarlat,1530-Germignan,1563) un amante y defensor brillante e inteligentísimo de las libertades, solo por el concepto que Montaigne -que acabó convertido en albacea de su obra- tenía de él ya merecería todo la atención del mundo. Su estima queda patente en este fragmento de De la amistad, capítulo XXVII de  los Ensayos del filósofo:"A nadie he conocido que en talento y luces naturales pudiera comparársele. (...) Si se me obligara a decir por qué yo quería a La Boétie, reconozco que no podría contestar más que respondiendo porque era él, porque era yo (...) Nuestros espíritus se compenetraron uno en otro; nada nos reservamos que nos fuera peculiar, ni que fuese suyo o mío. (...) Si comparo todo el resto de mi vida (...)con los cuatro años que me fuera dado disfrutar de la dulce compañía y del trato de este personaje, el otro tiempo de mi existencia no es más que humo, no es más que noche pesada y tenebrosa". Precisamente con esta declaración de amor abre el editor gallego Roberto Ramos Fontecoba el prólogo para la publicación del texto del pensador francés De La Boétie La servidumbre voluntaria que preparó en su sello Página Indómita. La tesis de esta obra que aborda los excesos del poder y la dominación no puede ser más actual: únicamente puede ser sometido por el tirano quien así lo desea o lo permite; es decir, el que sirve es porque se reconoce como servidor, como siervo. La Boétie era apenas un estudiante -nacido en el seno de una familia noble del Périgord, y vecino por tanto de Montaigne- cuando escribió este discurso o panfleto, que bien se puede considerar un antecedente de la desobediencia civil que preconizó Thoreau y el ideario libertario de Tolstoi, y que -como recuerda Ramos Fontecoba- se adelanta a las reflexiones de Simone Weil y Hannah Arendt sobre el totalitarismo. Y es que la pugna entre la libertad del hombre y su voluntad de servir sigue vigente.

H. J. P. Redacción. La Voz de Galicia, viernes 11 se septiembre de 2020

miércoles, 14 de octubre de 2020

Desde Francia recogiendo la basura de la Ruta Jacobea

Zsolt Vadász
En Santiago nos hemos acostumbrado a encontrar gente muy extraña. Viajeros incansables, extranjeros del otro lado del mundo y personas con historias difícilmente creíbles incluso para quienes ya han escuchado de todo. 

Zsolt Vadász es un viajero húngaro de esos que atrae atención a sus paso. No sólo por su curiosa estética, ni por su icónico Trabant que lo acompaña en sus aventuras, sino por el largo historial de viajes que tiene a sus espaldas y que no deja de crecer.

Hace algo más de 50 días este viajero convertido en peregrino dejó su vehículo en Francia para partir desde Saint Jean Pied de Port en dirección a Santiago, ataviado con un traje de peregrino medieval y con un ancho sombrero. Más allá de seguir los pasos de los miles de caminantes que anualmente realizan la Ruta más transitada del Camino, Zsolt se propuso aportar su granito de arena a la conservación de un espacio por el que ya había pasado en otras ocasiones. "Este es mi 18º Camino, los he hecho todos y mi corazón me decía que hiciese algo por mantener la Ruta Francesa", cuenta el peregrino.

Así, con el objetivo de devolverle a la Ruta todo lo vivido, Zsolt "paraba en un pueblo, compraba una bolsa de basura de 50 litros y me dedicaba a recoger la basura, nunca de las zonas residenciales o industriales, solo d el Ruta". En el camino se encontró de todo, " sobre todo mucho plástico, botellas y latas".

En los primeros diez días este caminante ya había recogido más de 500 litros de basura. Una actividad que compartió a través de sus redes sociales, donde muchos otros intrépidos viajeros lo siguen y que animó a que otros peregrinos se uniesen a la iniciativa de dejar el Camino un poco más limpio.

 Así, según explicó en una entrevista con un conocido medio de su Hungría natal, su objetivo era participar en actividades humanitarias en África, aunque el cierre de algunas fronteras y el conflicto armado de Mali lo obligaron a cambiar de planes...

Zolst asegura haberse quedado impresionado por el ambiente que actualmente se vive en el Camino. Acostumbrado a los anteriores en los que había "mucha gente que llevaba música o hablaba muy alto", en esta ocasión el caminante ha podido disfrutar  de un recorrido en solitario, "muy espiritual y muy bueno para meditar". Está caro que el "barullo" que para algunos da vida a la Ruta, puede ser molesto para quienes simplemente prefieren caminar en silencio, durmiendo en el bosque y recogiendo kilos  y kilos de basur a su paso.

A.B. El Cooreo Gallego, domingo 27 de septiembre de 2020.

martes, 13 de octubre de 2020

Christian Boltanski. "Mi trauma es mi fecha de nacimiento".

En el taller de Christian Boltansky. Foto: Léa Crespi

Su estudio, un antiguo taller de carpintería en el suburbio parisiense de Malakoff, está lleno de bebés gigantes. Christian Boltanski (París,1944) pasó buena parte del confinamiento ampliando cientos de imágenes de recién nacidos que encontró en un viejo diario polaco, como si esperara que esos retoños le contagiasen las ganas de renacer. El artista, que acaba de protagonizar una retrospectiva apoteósica en el Centro Pompidou, última de las consagraciones en una larga trayectoria marcada por la cuestión de la memoria y el olvido, se plantea ahora cuál será su próximo paso en un momento de máxima incertidumbre, para el mundo y para su propia obra.

P.- ¿Cómo ha vivido este año tan extraño?

R.- La verdad es que estoy muy deprimido. Muchos artistas se pasan la vida confinados, pero yo no. Giacometti no salía nunca de su estudio, salvo para ir al bistró y al burdel, pero yo tengo una necesidad muy grande de estar activo. Tal vez porque soy un pesimista nato y necesito llenar mi tiempo con muchas cosas. Así evito encontrarme solo y pensar demasiado...

P.- Sostiene que cada artista trabaja a partir de un trauma original. ¿Cuál sería el suyo?

R.- Mi trauma es mi fecha de nacimiento. Nací justo al final de la Segunda Guerra Mundial y crecí escuchando a los amigos de mis padres, supervivientes del Holocausto, relatar sus tristes historias durante noches enteras. Desde bebé supe que el mundo es un lugar terrible y que todos íbamos a morir. El arte ha sido como un psicoanálisis muy lento a través del que ese trauma se me ha hecho un poco más llevadero.

P.- Precisamente, se suele vincular su obra a la experiencia judía.

R.- En realidad, no soy judío. Mi madre era católica, y mi padre, un judío converso. Hice la primera comunión, me encantaba la catequesis y no he entrado en una sinagoga en toda mi vida. En mi obra he querido reflejar una dimensión más universal y no he usado ni una sola vez en mi trabajo. Lo que sucede es que mi padres se pasó casi dos años escondido  de los nazis bajo el suelo de nuestra casa...Heredé el miedo que ellos sentían por una masacre que, en realidad, nunca terminó. Seguimos viviendo rodeados de masacre, aunque nos creamos en período de tregua.

P.- Y, pese a todo , usted se considera culturalmente japonés...

R.- Me interesan el budismo y el sintoísmo porque son religiones en las que, como sucede en el judaísmo, no hace falta creer en Dios para ser religioso: basta con intentar encontrarlo. Además los japoneses destruyen sus templos cada 20 años y los vuelven a construir de manera idéntica, aunque con inevitables variaciones. Yo hago lo mismo con mi obra: destruyo cerca del 90% de mi trabajo y luego lo recreo cuando la ocasión lo requiere. Es como una partitura musical: la base siempre es la misma, pero existen infinitas variaciones en la forma de interpretarla...

Álex Vicente. Babelia. El País, sábado 26 de septiembre de 2020.  

 

lunes, 12 de octubre de 2020

El crepúsculo de un semidios

Fotograma de Celebration (Youtube)

Celebration se rodó entre 1997 y 2001, coincidiendo con los últimos años de trabajo de Yves Saint-Laurent. El documental pretendía formar parte de los fastos que su socio y compañero durante medio siglo, Pierre Bergé, quería para la despedida del mito. Pero algo se escapó a su férreo control y lo que afloró no fue solo el tremendismo de un genio cautivo en su ocaso, sino el papel del propio Bergé en ese encarcelamiento. en esa vida que en palabras del empresario era la de un "sonámbulo"que no debía ser "despertado". La película se estrenó en la Berlinale de 2007, pero acabó secuestrada por los abogados de la maison para revivir ahora, cuando ya están muertos sus protagonistas. Es un documento fascinante sobre el crepúsculo de un dios de la moda que formalizó su retirada en 2002, a los 65 años, seis antes de morir. Saint Laurent apela a su inclinación natural al dramatismo al describir la moda como un oficio que, aunque no es un arte, se vale de personas que se comportan como artistas. "Debemos sacrificarlo todo por nuestro trabajo", sentencia. "A veces, incluso nuestras vidas".

Su extrema incomodidad ante la cámara obligó al director Olivier Meyrou a rodar con la misma estrategia que cuando se filma la vida salvaje: elegir un rincón discreto, permanecer muy quieto y esperar. El  resultado es una película que, aunque ocurre en un templo de la ligereza, capta un ambiente espeso, opresivo y tóxico, donde solo parece correr el aire en el alegre taller de las costureras. Bergé sobresale en la piel del fiel carcelero, fiscalizando cada movimiento de un creador que cumple con su parte del contrato como sonámbulo encerrado en una jaula de oro. "Está en su mundo y yo intento garantizar que siga así, que pueda caminar sobre los tejidos sin caerse", le confiesa el empresario a un periodista. Minutos antes la cámara roba un momento incómodo. Bergé se dirige al diseñador como a una marioneta y le instruye sobre cómo ejecutar un discurso "erguido", sin dejarse caer "como un viejo". Ensimismado y vencido Saint Laurent parece indiferente a todos incluido su bulldog francés, Moujik IV. Solo parece revivir ante la belleza de alguna modelo o cuando una maquilladora le empolva la cara y él, con delicada amabilidad, le devuelve una sonrisa...

En Celbration, Meyrou se detiene en momentos significantes: la mirada perdida del modisto, el vigor omnipresente de Bergé y las tensiones lógicas del trabajo en equipo. El asunto recurrente parece el precio a pagar, una infelicidad asumida con una frivolidad exasperante. En vida Bergé mencionó alguna vez a esa "gran familia, magnífica y lamentable, de los nerviosos" a la que pertenecía su pareja. El patetismo que refleja este documental los lleva aún más lejos y, con el champán en la mano, hasta se permiten brindar  en nombre de la desgracia de un "recluso" que ha sacrificado su alegría por "la creación".

Elsa Fernández Santos. El País, sábado 10 de octubre de 2020. 

domingo, 11 de octubre de 2020

Joseph Pérez, historia sin leyendas

Joseph Pérez
Uno también se retrata por sus héroes. Si Joseph Pérez, el hispanista francés fallecido el jueves en 
Burdeos a los 89 años tenía uno, ese era el cardenal Cisneros, por su defensa del bien común y los intereses generales. "Es el mayor hombre de Estado que ha tenido España. Desgraciadamente llegó viejo y tarde", afirmaba en Madrid, cuando presentó su biografía sobre el personaje. Pérez también creía en el bien común y en los intereses generales. Sin ningún tipo de complejos se definía a sí mismo como jacobino, esto es, al final de todo, un señor que quiere que en todos los pueblos de Francia, tengan mil o un millón de habitantes, haya una escuela, una oficina de correos y un centro médico para todos. Él se sentía un producto de esa visión francesa que ahora creía en extinción. "Nací en 1931, mi lengua materna era el valenciano, no el castellano. A los cuatro o cinco años ingresé en la escuela. En la escuela jacobina entraba un pequeño español, un pequeño portugués y salía un francés. Eso se ha terminado. La idea jacobina es fundar una nación formada por ciudadanos con los mismos derechos, nadie me dijo nada por ser español. ¿Por qué no se hace con los árabes como se hizo conmigo?".

Joseph Pérez nació en Laroque-d'Olmes (Francia) en 1931, pocos años después de que sus padres, valencianos, emigrasen a esta región pirenaica. La España de 1924 ofrecía pocas oportunidades de progreso. Ambas circunstancias acabaron pesando sobre el futuro profesional de Pérez, tan interesado por la Historia como por la patria de sus padres. La suma de ambas inquietudes alimentó un sólido hispanismo, especializado en la edad moderna, que en 2014 mereció el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales. Perteneció junto a John H, Elliott y Geoffrey Parker, al grupo de especialistas extranjeros que ayudaron a desenredar mitos, personajes y episodios de unos siglos en los que España pasó de ser una potencia a una ruina económica...

El primer libro que publicó fue su tesis sobre la revolución comunera, el levantamiento contra Carlos V entre 1520 y 1522, que en España se publica 1977. Luego se sucederían obras sobre Carlos V, Teresa de Ávila o Cisneros. Pero no sólo investigó a los protagonistas históricos, también estudió aspectos de la sociedad de aquel tiempo como la presencia de los judíos en la Península (Historia de una tragedia  el inequívoco título del libro que dedicó a su expulsión en 1492), la Inquisición o efectos colaterales contra la leyenda negra, a la que dedicó un ensayo que indagaba en las causas de un fenómeno surgido en el siglo XVI que sigue despertando encendidas controversias. "Siempre me pareció algo exagerada, que procedía de prejuicios que había que desterrar", señalaba el historiador que presidió la Universidad de Burdeos III entre 1978 y 1983.

Galardonado con múltiples distinciones en Francia y en España (tenía, entre otras, la Gran Cruz de la Orden de Alfonso X El Sabio y la Oficial de la Legión de Honor francesa), pertenecía a varias Academias de España y Portugal. Entre 1989 y 1996 dirigió  la Casa de Velázquez.

Su último libro publicado en España fue la biografía del cardenal Cisneros, dentro de la colección Españoles eminentes, que coeditan la editorial Taurus y la Fundación Juan March. Como muestra de su relación estrecha con España, el Ayuntamiento de Villalar de los Comuneros decretó dos días de luto oficial tras conocerse la muerte de un historiador que estuvo muy vinculado a la localidad vallisoletana, donde hay una calle con su nombre.

Tereixa Constenla. Madrid. El País, sábado 10 de octubre de 2020. 

sábado, 10 de octubre de 2020

Rimbaud y Verlaine, ¿en el Panteón?

Rimbaud y Verlaine

Arthur Rimbaud y Paul Verlaine, poetas y amantes, podrían entrar en el Panteón, el templo laico de la República, donde reposan los "grandes hombres" de la nación, y un puñado de mujeres. La iniciativa para trasladar los restos al monumento agita en Francia un debate entre literario y político. ¿Es hora por fin de honrar a dos de las mayores glorias de su literatura, perseguidas en su tiempo, y entronizar en su pedestal más alto a sus malditos? ¿O canonizar de esta forma a Rimbaud y Verlaine supone un insulto póstumo a quienes les habrían horrorizado los homenajes oficiales? El presidente Emmanuel Macron tiene la última palabra.

Todo empezó el pasado marzo, justo antes del confinamiento, cuando un grupo de amigos -entre ellos Barré y el ensayista Frédéric Martel-, de excursión por el norte de Francia, visitó el cementerio en Charleville-Mézières, ciudad natal de Rimbaud. Ahí está enterrado el poeta junto a su familia..

"Nos espantó un poco ver al pobre Rimbaud rodeado de los suyos, de quienes no cesó de huir durante su vida y quienes, después de su muerte tergiversaron el sentido de su obra", explicaba hace unos días el editor Jean-Luc Barré, en la presentación de la nueva edición de la biografía de referencia del poeta, obra del ya fallecido Jean-Jacques Lefrère. "Nos dijimos: ¡Hay que hacer algo! ¡Tenemos que sacarlo de ahí! Así comenzó una de esas polémicas que solo podrían ocurrir en Francia, con bandos irreconciliables, tribunas en los medios de comunicación, intercambios descalificativos, y todo, por dos poetas del siglo XIX y por su significado en la historia de de la literatura y para la Francia de hoy.

Más de cinco mil personas firmaron la petición, presentada el 9 de septiembre, para incorporar al poeta de Una temporada en el infierno  y al de lso Poemas saturnianos en el Panteón. "Ambos al mismo tiempo, pero no como pareja", precisa Martel, autor de Sodoma  (Roca Editorial, 2019) y de otros ensayos sobre la historia y la cultura gay global. La actual ministra de cultura, Roselyne Bachelot  lo apoya con entusiasmo. En algunos círculos de estudiosos y lectores de Rimbaud pronto saltaron las alarmas. Y estalló una guerra civil entre rimbaldianos que, como recuerda Martel  en el prólogo de la biografía de Lefrère, viene de lejos, cuando a la lectura católica del poeta Paul Claudel se oponía la surrealista de Louis Aragon y André Breton. 

"Señor presidente, usted que presta atención a los símbolos, no cometa este error, o peor, esta metedura de pata", imploran los firmantes de una tribuna publicada el 17 de septiembre en Le Monde  y firmada por Alain Borer, autor de varios libros sobre Rimbaud, y poetas, escritores y críticos como Adonis, Tahar Ben Jelloun o Antoine Compagnon. Los firmantes sostienen que "es importante afirmar que Rimbaud fue homosexual toda su vida; todo ello lleva a creer que su relación amorosa con Verlaine formaba parte de la provocación antiburguesa". Y ven en el intento de panteonalizarles una señal  de la "americanización que invade la cultura francesa". Una descendiente indirecta del poeta se ha quejado :"Todo el mundo pensará que son homosexuales pero no es verdad"...

Marc Bassets. París. El País, jueves 24  de septiembre de 2020.

viernes, 9 de octubre de 2020

"Las criadas" de Genet vuelve en su versión más desgarrada

Cartel de Las criadas de Luis Luque
Sobre la mesa desde la que dirige los ensayos de Las criadas, Luis Luque deposita todos los días dos libros: uno que escribió Juan Goytisolo, Genet en el Raval, sobre las andanzas del autor de esa obra a principios de los años treinta en el entonces canallesco y subversivo barrio barcelonés, y otro que se publicó a raíz del estreno de la pieza en Madrid en los ochenta, protagonizado por Nuria Espert y Julieta Serrano. Junto a estos volúmenes, Luque no se separa del libreto ni de día ni de noche, lleno de anotaciones y papelitos de colores, que ha traducido y versionado Paco Bezerra, Premio Nacional de Literatura Dramática en 2009.

Luque (Madrid, 47 años) y Bezerra (Almería,42 años), que forman un tándem poderoso en la escena española, se han sumergido en el mundo de las miserias, pasiones, desamores y conflictos sociales que retrató Jean Genet (París, 1910-1986) en Las criadas, primera obra teatral que el autor francés escribió durante su estancia en la cárcel y que estrenó allí mismo en 1947 . Con Ana Torrent y Alicia Borrachero en el papel de las sirvientas, y Jorge Calvo en el de señora, su montaje se estrena mañana en el Matadero de Madrid.

Las criadas era uno de los montajes que Luque tenía en el cajón cuando Natalia Menéndez, nombrada directora del Teatro Español de Madrid hace poco más de un año, le llamó para formar parte de su equipo de gestión. Olvidó todos los proyectos excepto esta obra desgarradora, todo un icono del siglo XX. Le fue imposible abandonarla porque le dejaba sin aliento. "Hay algo que te atrapa, es un enigma oscuro y los enigmas están para intentar descifrarlos y no pasarlos por encima. Enfrentarse a Genet es un peligro, pero solo desde el peligro el arte se convierte en reflexión. Genet es un ladrón, un mendigo, un prostituto, un matón genial en palabras de Simone de Beauvoir, que escribe Las criadas con 37 años, en un momento vital muy cercano al abismo cuando estaba en prisión". 

Las criadas, un clásico de los escenarios y del cine en el mundo entero, narra la historia de dos mujeres que cada noche celebran un ritual en el que juegan a asesinar a su señora, intercambiando sus identidades y sus ropajes. El montaje, que tenía previsto su estreno el pasado abril, ha vivido cambios significativos desde entonces. "La pandemia nos ha pasado por encima. A mí me ha convertido en un ser humanos distinto y por tanto mi aproximación al texto ha sufrido también cambios. Creo que, de alguna manera, la obra ha ganado en humanidad. Todos tenemos ahora más miedo y eso aflora ahora también en ese miedo de las dos criadas que caminan hacia su destino fatal..."

Rocío García. Madrid. El País, jueves 8 de octubre de 2020.


jueves, 8 de octubre de 2020

Escribir para superar la muerte

Annie Ernaux. (Foto de Cati Cladera)
En Una mujer, crudo relato biográfico y reflexivo, Annie Ernaux describe cómo la fuerza y la luz de su madre se borran poco a poco con la demencia. Concluye Ernaux:"Esto no es una biografía, ni una novela, naturalmente, quizá  algo entre la literatura, la sociología y la historia". Este resumen coincide con el desencadenante del libro: "Mi proyecto es de naturaleza literaria, puesto que se trata de encontrar una verdad sobre mi madre que solo puede alcanzarse mediante palabras". La característica principal de los textos de esta brillante escritora radica en que, con una una violencia expresiva casi imperceptible, natural, nos fuerza a transcender el estilo para expulsarnos hacia la realidad y hacernos pensar en la vida . La depuración y la sabiduría en cada una de sus elecciones estilísticas aprieta en el foco exacto de un dolor , íntimo y personal, que, sin embargo, es común: hablar de la degradación de la madre es hablar de nuestra próxima degradación. Ernaux propina golpes llenos de sentido, se concentra productivamente en una foto, en lo externo, lo contextual : allí subyace la prospección psicológica. Las frases, pronunciadas por la madre, repetidas, tienen en su vulgaridad una potencia epifánica. La escritora describe cómo la fuerza y la luz de una mujer  se van demacrando con la demencia y, en ese relato que intercala biografía y reflexión  sobre el proceso de escritura, textos y vida se solapan, se reconcentran, reaparecen, trazan círculos...Ernaux evoca una frase en una carta de la madre que será el embrión de otro libro sobrecogedor:"Querida Paulette, no he salido de mi noche..."

En la limpieza difícil de cada página habita una verdad y la convicción de que con las palabras se puede conjurar el dolor, porque Une femme es un libro de duelo: "Escribo sobre mi madre para, a mi vez, traerla al mundo". La escritora lo hace desde al conciencia política de que el duelo, la desesperación, el libro que tenemos entre las manos, son un lujo. "Hay que mantener el estatus", exclama la madre comerciante, la madre contradictoria, la madre poliedro que, cuando se siente demasiado observada, reta:"¿Quieres mi retrato?". Ernaux aprende de su madre que apariencia física y cultura son patrimonios imprescindibles para el desclasamiento. Las apariencias no engañan. Son lo mismo que la libresca vida interior. Cuando la hija supera la brecha de clase gracias al esfuerzo de esa madre, campesina y obrera que, asciende socialmente regentando una tienda de comestibles, la luchadora experimenta la contradicción de haber cumplido un deseo que la excluye. Durante la adolescencia, la escritora constata la repugnancia y el miedo materno ante la transformación física. El peligro de la sexualidad femenina. Distancia. Pelea. Reencuentro en la vulnerabilidad de la progenitora demenciada. Ernaux escribe para superar el dolor de la muerte: se acaban ciertas exigencias y, después, llega una culpa que la escritora nunca aborda en términos religiosos. El espíritu en Ernaux son unas manos que trabajan  y esa es su concepción de una escritura anclada en el género y la clase. La admiración se expresa sin apología y el amor se revela en la búsqueda matizad de la verdad. Ernaux sabe que no volverá a escuchar la voz de su madre y escribe confiando no en el poder paliativo, sino re-creativo de la literatura: no se comporta como una diosa creadora, sino entendiendo el lenguaje como papilla biológica de la que surge la vida. La narración de la muerte es externa, pausada, mecánica. Solemos vivirla así. Después llega lo peor y hay quien se salva un poco porque posee el capital de la escritura. Ernaux lo sabe bien. Lo aprendió de su nadre: la escritura es un capital que nos une pero también nos separa.

Marta Sanz. Babelia. El País, sábado 26 de septiembre de 2020.

   

miércoles, 7 de octubre de 2020

Nueva Caledonia seguirá siendo francesa

Noumea, la capital de Nueva Caledonia

Dos años después de la primera consulta sobre el proceso de independencia de Nueva Caledonia, la respuesta mayoritaria al segundo referéndum de independencia celebrado ayer en este archipiélago francés del Pacífico sigue siendo no. El rechazo a independizarse de París volvió a imponerse, esta vez con un 53,3%. Es un resultado más débil que en la votación de 2018, pero suficiente para mantener el statu quo en este rincón a 18.000 kilómetros de la Francia metropolitana y a 2.000 de Australia.

En una breve y sobria alocución en el Elíseo, el presidente Emmanuel Macron, manifestó un "agradecimiento" tras conocer "el deseo de la mayoría" de que Nueva Caledonia siga en Francia, lo que interpretó como una "muestra de confianza en la República". Al mismo tiempo aseguró haber "escuchado la voz de aquellos y aquellas a los que anima la voluntad de independencia", a quienes aseguró que formarán parte de la "construcción de la Nueva Caledonia del mañana".

El resultado implica que Nueva Caledonia, con 271.000 habitantes y en manos francesas desde 1853, seguirá siendo una colectividad francesa, es decir, un territorio dependiente de París, pero con competencias propias. Hace dos años, el no a la secesión ganó con un 56,7%, un margen suficiente pero tampoco tan contundente como para impedir que los independentistas mantuvieran la esperanza de un resultado distinto en una nueva consulta. Los acuerdos entre París y Noumea (la capital del archipiélago) prevén la posibilidad de una tercera y última consulta en 2022...

Usada como presidio para delincuentes franceses en el siglo XIX, Nueva Caledonia figura en la lista de la ONU de 17 territorios no autónomos que deben autodeterminarse. El 39 % de la población es kanak, el 27% es europea o caldoche, un 8% es originaria del territorio de ultramar de Wallis y Futuna y  otro 8% son mestizos y de otras comunidades. Más allá del valor simbólico de ser una de las últimas colonias de Francia, Nueva Caledonia tiene un interés estrátegico para París, y además es la cuarta reserva mundial de niquel.

Silvia Ayuso. París. El País, lunes 5 de octubre de 2020. 

martes, 6 de octubre de 2020

Suspendida la creación en la Provenza del mayor Museo Picasso del mundo

En Francia hay varios museos dedicados a Picasso. Comenzando por París. El Museo Picasso tiene como sede el hermoso Hôtel Salé, en el corazón del Marais, el barrio más efervescente de la capital gala. Ha sido remozado por completo y abrió sus puertas en octubre de 2014. A la muerte del artista en 1973 sus herederos pagaron los impuestos de sucesión con la dación de obras de Picasso. El Estado francés fue el primero en escoger: 203 pinturas, 158 esculturas, 88 cerámicas, 1.500 dibujos, 1.600 grabados... Se sumaron sucesivas donaciones de la familia y adquisiciones.

Capilla románica del castillo de Vallauris
Tras la Segunda Guera Mundial Pablo Picasso puso rumbo a la Costa Azul y la Provenza. En Antibes se alza  majestuoso el Castillo Grimaldi, que fue utilizado por Picasso como taller en 1946. En 1966 se inauguró como Museo Picasso. Otra localidad muy ligada al genio es Vallauris, adonde llegó en 1948, esta vez acompañado por Françoise Gilot, con quien tuvo dos hijos (Claude y Paloma). Se instalaron en la villa La Galloise. Estuvo intermitentemente en Vallauris hasta 1955, cuando se marchó ya con una nueva mujer a su lado, Jacqueline Roque. A esta la conoció en el Taller Madoura de cerámica que regentaban Suzanne y Georges Ramié. Ya no existe. En 1952 pinta dos murales (la Guerra y  la Paz) en la capilla románica del castillo de Vallauris, hoy Museo Picasso en la Plaza de la Liberación. Es emocionante visitar esta pequeña capilla. Picasso donó los murales al Estado francés en 1956 y a la ciudad de Wallauris su escultura "Hombre con cordero", que preside la plaza de la iglesia.

A todos ellos hubiera podido sumarse uno más, que dicen sería el Museo Picasso más grande del mundo, con mil pinturas del artista español, Pero, al parecer los planes se han abandonado después de que se rompieran las negociaciones sobre al propiedad, un antiguo convento en el sur de Francia. Según publica The Art Newspaper, en 2018 Catherine Hutin-Blay, hija de Jacqueline Roque, última esposa del artista, anunció que compraría el Couvent des Prêcheurs en la ciudad de Aix-en-Provence (la ciudad de Cézanne) y lo convertiría en un museo. Hutin-Blay habría firmado un acuerdo para comprar la propiedad por 11,5 millones de euros en diciembre de 2017, un precio de compra por debajo del valor de la propiedad, que era de 12,2 millones, porque el museo podía convertirse en un importante destino turístico, con una cifra de visitantes prevista de 500.000 al año.

Pero cuentan que tras cuatro años de negociaciones entre el Ayuntamiento de Aix-en-Provence y Hutin-Blay, el acuerdo se rompió cuando la ciudad trató de añadir una cláusula al contrato que requería que este lugar, que había sido recientemente una escuela secundaria, funcionaría como museo durante al menos 15 años después de las obras de rehabiilitación del edificio, que durarían unos cinco años. "Teníamos que obtener esa garantía", escribió la alcaldesa de Aix-en Provence, Marise Joissains Masini, en Facebook. "Fue esta última cláusula la que Catherine Hutin-Blay se negó a incluir en el acuerdo, a pesar de que inicialmente la había aceptado".

Según recoge Art News, el Museo Jacqueline y Pablo Picasso (así pretendía llamarse ) se centraría en la influencia de Jacqueline Roque en la obra de Picasso y en la vida compartida de la pareja. Se conocieron en 1953 y estuvieron casados desde 1961 hasta la muerte del artista, en 1973. Durante este período, Picasso la retrató más de 400 veces. El proyecto del museo incluía un espacio de 1.000 metros cuadrados para la colección permanente y otro de 500 metros cuadrados para exposiciones temporales, además de un auditorio, espacios dedicados a la cerámica y el grabado y un centro de investigación.

Cuando Jacqueline Roque murió en 1986, Hutin-Blay heredó la colección Picasso de su madre, que incluye unas 1.000 pinturas, así como dibujos, cerámicas, esculturas, platos pintados y fotografías. El museo habría sido gestionado por la fundación Madame Z, que Hutin-Blay bautizó en honor al apodo que Picasso le puso a su madre. Los dos están enterrados en el castillo de Vauvenargues, propiedad de Hutin-Blay, quien aceptó abrirlo al público para grupos reducidos y solo durante unas semanas entre 2009 y 2010.

Natividad Pulido. Madrid, ABC, 25-9-2020