jueves, 15 de junio de 2017

El sabio revolucionario

Condorcet
Cuando en 1989, con ocasión del segundo centenario de la Revolución Francesa, el presidente François Mitterrand quiso trasladar al Panteón de París los restos del gran sabio y revolucionario Marie Jean Antoine Nicolas de Caritat, más conocido como Marqués de Condorcet, los operarios encargados de la faena se encontraron con que la fosa común del cementerio de Bourg-la-Reine, donde se suponía que estaban enterrados, estaba vacía. Pero se ejecutó un traslado simbólico. Condorcet apareció muerto el 29 de marzo en 1794 en su celda de la prisión de dicho pueblo, apenas dos o tres días después de su detención. Tenía 50 años. Se supone que se suicidó con veneno o que, tal vez, sufrió un accidente cerebrovascular. Miembro y secretario de las academias nacionales de Letras y de Ciencias, diputado de la Asamblea Legislativa y de la Convención, revolucionario adscrito a los girondinos, la suerte de Condorcet se torció definitivamente cuando los jacobinos de Robespierre, en julio de 1793, iniciaron el período del Terror y ordenaron su detención. Logró ocultarse casi nueve meses en una casa amiga, tiempo que dedicó a escribir su Bosquejo de un cuadro histórico de los progresos del espíritu, que publicada póstumamente - hay edición en español en el Centro de Estudios Constitucionales- resultó ser una de sus grandes obras. Enciclopedista, ilustrado, racionalista y, quizás más reformista radical-liberal que revolucionario, Condorcet fue tropezando en varias piedras desde la toma de la Bastilla: vio rechazado su proyecto de reforma educativa al ser tachado de contrario al principio de igualdad, fue igualmente rechazado su proyecto de Constitución y, contrario a la pena de muerte, se opuso a la ejecución de Luis XVI. Los jacobinos lo tenían en su punto de mira por moderado, desde que dieran su golpe de estado de mayo-junio en 1793... Autor de decenas de opúsculos, folletos y libros, la personalidad intelectual y los frutos de la sabiduría de Condorcet son casi inabarcables. ..... Una prueba de ello es la reciente edición a cargo de Laetoli, por primera vez en español, de sus Reflexiones sobre la esclavitud de los negros, obra publicada en 1781 y decisiva para la abolición de la esclavitud por la Convención Nacional en 1794.....
Manuel Hidalgo. El Mundo, sábado 10 de Junio de 2017 

No hay comentarios:

Publicar un comentario