Tríptico de la Capilla Real de Granada |
Despuntar como pintor en el Flandes del siglo XV no debió de ser tarea fácil, a la sombra creativa de grandes figuras como Jan Van Eyck o Rogier Van de Weyden. Sin embargo albergó otros importantes creadores coetáneos que contribuyeron al esplendor de la escuela flamenca. Este es el caso de Dieric Bouts (1410-1475) al que se le consideraba uno de los maestros flamencos más importantes, Quizá también uno de los más enigmáticos y singulares. Se le llego a denominar "el pintor del silencio". Bouts pasó casi toda su vida en Lovaina, donde se lo otorgó el título de pintor de la ciudad en 1472. Fue en aquella efervescente ciudad gloriosa capital cultural de la época con su recién estrenada universidad donde produjo la mayoría de su obra. Y actualmente sigue ligado a esta población ya que dos de sus más importantes trípticos aún se conservan en el simbólico lugar para el que fueron concebidos: la iglesia de San Pedro. Dos retablos que evidencian el virtuosismo del artista. La última Cena, con un uso revolucionario de la perspectiva, y El martirio de San Erasmo, un poderoso y detallista dominio del retrato y el paisaje.
Parece lógico pues que la capital del Brabante Flamenco quiera gratificar a este genio con un homenaje en forma de festival. Desde el pasado septiembre hasta mediados de enero de 2024 New Horizons - Dieric Bouts Festival inunda las calles, museos y otros puntos de interés de la localidad. Sin duda la piedra angular del festival es la exposición Dieric Bouts. Creator of Images organizada por el M-Museum, la retrospectiva más grande del creador hasta el momento. En total, una treintena de obras gracias a una red de préstamos internacionales, varios procedentes de España, como es el caso del Tríptico de Granada.
El día 28 del pasado mes de junio llegó el Tríptico de la Pasión a Lovaina, lugar en el fue concebida por Bouts. Tras más de 500 años en Granada, vuelve a la ciudad flamenca. El Tríptico es la joya de la colección de la Capilla Real granadina, donde se encuentra el sepulcro de los Reyes Católicos. Pintado ente 1450 y 1458 está formado por tres paneles: el central muestra la escena del Descendimiento, con la Crucifixión en el izquierdo y la Resurrección en el derecho. Durante la exposición en el M-Museum se podrá ver por primera vez el retablo con la compañía de otras obras maestras del pintor como la magnificiente La última Cena, El Cristo de los Dolores o el Martirio de San Erasmo. Junto a ellas se expondrá otra pieza que también se ausentará temporalmente de la Capilla Real: Virgen con el niño y cuatro ángeles (1448). En realidad, el retablo permanecerá en préstamo hasta finales de 2026, cuando se culminarán los trabajos de su restauración. Dicha restauración es una condición básica del préstamo y se llevará a cabo por los expertos del Instituto Real de Patrimonio Artístico de Bélgica, Kik-IRPA. Este centro es referencia internacional en la renovación de la pintura flamenca del siglo XV. Posteriormente, algunas piezas se mantendrán en el museo para Bouts Studio, muestra que se centrará en la investigación y restauración de obras maestras...
Pablo Martínez Fraga. El Cultural, 3-11-2023.
No hay comentarios:
Publicar un comentario