El pasado, el presente y el futuro se dieron cita en el desfile del 14 de julio en París. El presente se coló cuando algunos chalecos amarillos silbaron al presidente de la República. Luego, 152 personas, entre ellos varias figuras del movimiento, fueron detenidos.
Entre el homenaje a los heridos del pasado y la exaltación de las armas del futuro, con la guinda de un soldado volador, estaba el presente. Europa. El desfile celebraba la iniciativa Europea de Intervención. Por eso, Angela Merkel y varios dirigentes europeos, entre los que no estaba Pedro Sánchez, acompañaron a Macron en la tribuna de la plaza de la Concordia. Un despliegue en el que tomaron parte 4.299 personas, 237 caballos, 129 vehículos, 67 motos, 67 aviones y 40 helicópteros. Con los Campos Elíseos como escenario grandioso, del Arco de Triunfo a la Concordia, Francia muestra su músculo militar. Y ofrece, televisión mediante, un espectáculo lleno de historia, uniformes brillantes, banderas al viento y músicas militares.
La contestación no se vió en la tele ni en la Plaza de la Concordia. Algunas decenas de personas silbaron y gritaron: "Macron, dimisión", cuando el presidente bajaba los Campos Elíseos, de pie sobre un vehículo militar, escoltado por motoristas y jinetes de la Guardia Republicana. Para entonces, dos figuras del movimiento de protesta, Maxime Nicolle y Jerôme Rodrigues estaban ya detenidas. A primera hora de la tarde, había ya 152 detenidos entre los que estaba otro de los cabecillas de los chalecos, Éric Drouet...
Iñaki Gil. París.El Mundo, lunes 15 de julio de 2019
No hay comentarios:
Publicar un comentario