![]() |
Club El Silencio de Paris |
A principios de los 2.000, el negocio de la música electrónica despegaba y, según fue evolucionando, Frisch impulsó en París lo que concebía como un lugar de encuentro para los miembros del mundo artístico francés, una especie de club donde mezclar la cultura y la música en horarios poco habituales para el gran público. Entonces llegó el éxito. En 2011 inauguró de la mano de Lynch el club Silencio, local de culto ubicado en el 142 de la rue Montmartre que rinde homenaje al que el cineasta retrata en Mulholland Drive. Un local concebido con el objetivo de reinventar la vida nocturna parisiense y convertirse en el lugar de encuentro de personajes del mundo del cine, la cultura y la arquitectura.
Silencio París comenzó enfocado en el cine, pero se expandió rápidamente por otros ámbitos. Risch se asoció con museos y entidades culturales para programar allí. De este modo, los artistas menos conocidos tiene la oportunidad de mostrarse sin las cortapisas temporales y la anticipación que conlleva una galería. El éxito de la idea lo llevó a abrir un año después Wanderlust, también concebido como club, restaurante y espacio artístico en el muelle de Austerlitz, a orillas del Sena. En 2019 inauguró en un antiguo cine el restaurante Beau Regardy; al tiempo, otro club en el interior del Théatre du Châtelet. Una carrera empresarial que la pandemia no ha frenado.
![]() |
...un punto de encuentro para artistas y amantes de la cultura. |
Como en sus otros negocios, en este, la gastronomía también actúa como un elemento más de la oferta cultural. En El Silencio Ibiza lo hace de la mano del chef Jean Imbert, cocinero elegido para sustituir Alain Ducasse al frente de los fogones del Plaza Athénée de París...
Lucía Rodríguez. Ibiza. El País. Revista V. Martes 17 de agosto de 2021
No hay comentarios:
Publicar un comentario