sábado, 6 de noviembre de 2021

El Panteón de la Reconciliación

Nadie de la cuadrilla ni ninguno de mis familiares que me han visitado estos años en París había manifestado el menor interés por el Panteón. Ayer, un aguacero nos obligó a mi hija Anna y a mí a refugiarnos en el monumento en el que Francia rinde homenaje "a sus grandes hombres". Fue una suerte. Les cuento.

El presidente Emmanuel Macron ha elegido este lugar para dos conmemoraciones. Este otoño, para celebrar el 40 aniversario de la abolición por el presidente socialista François Mitterand de la pena de muerte en 1981, tres años después de que lo fuera en España por la Constitución de la democracia. Más relieve la de noviembre de 2020, Macron hizo entrar en el Panteón al escritor Maurice Genevoix, autor de un relato histórico que le marcó en su adolescencia y que había caído en el olvido. Los del 14 es la historia de un joven movilizado en 1914, que lucha en el Marne y en Verdún y cae herido en Les Éparges. Cien años después del fin de la Primera Guerra Mundial, quiso honrarlo como símbolo de esos "héroes tranquilos" que merecen un sitio en la historia, superpoblada de guerreros.

Macron que frecuentó el Panteón cuando estudió el bachiller en el vecino liceo de Enrique IV,  hizo algo que nadie había hecho en casi 100 años, encargar obra pública para embellecer el Panteón. Tenía ganas de ver las seis vitrinas de hierro y acero en las que Anselm Kiefer, artista alemán afincado en Francia, recreó escenas inspiradas por la Primera Guerra Mundial con materiales reciclados como alambre de espino o placas de hormigón . Citas de Genevois sirven de explicación. Además el francés Pascal Dusapin compuso una obra lírica cuyos extractos son difundidos por megafonía: textos en latín del Eclesiastés y de Virgilio así como locuciones funerarias de la Roma clásica se alternan con los nombres de 15.000 soldados civiles muertos en la Gran Guerra.

Esto entronca con el espíritu de reconciliación en el que la Tercera República basó hace 150 años el gran relato nacional francés. "Monarquía  y República, laicismo y cristiandad, convirtiendo dos pasados en uno", dice la guía del Panteón. "Rousseau y Voltaire conviven con Vercingetorix, Carlomagno y San Luis. Todos hablan con una sola voz, la de Francia".

En vísperas del Dia de Todos los Difuntos, celebración católica, con nuestras calles llenas de fiestas de Halloween, la cuadrilla hace votos por un relato nacional de España que integre a los muertos de ambos bandos de la Guerra Civil y rinda homenajes a las víctimas de ETA y no a sus asesinos.

Inaki Gil. El Mundo, 1/11/21

No hay comentarios:

Publicar un comentario