sábado, 22 de enero de 2022

Una visita al Parque Astérix

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Hay un lugar donde puedes cotillear en casa de Obélix (siempre hay un jabalí en el asador y cascos romanos abollados en la ventana), contemplar a Cleopatra navegando en su barco, enrolarte en las legiones, ver pasar volando un menhir y sentir, si no que el cielo cae sobre tu cabeza, sí que te precipitas vertiginosamente de lo alto con los pies hacia arriba: ¡por Tutatis, vaya montaña rusa! Es el Parque Astérix (Parc Astérix) en Plailly, en el norte de Francia, a 35 kilómetros de París, un recinto temático de 40 atracciones y espectáculos que ofrece mucha diversión para toda la familia y hace las delicias de los fanes de los galos irreductibles de Goscinny y Uderzo.

En el parque, según ha podido apreciar este enviado especial, tienes la posibilidad de vivir, si uno se atreve, sensaciones fuertes como las que proporciona o más bien inflige Oziris, una montaña rusa de aquí te espero en la zona ambientada en el Egipto de Astérix y Cleopatra, y en la que literalmente vuelas cabeza abajo haciendo loopings vertiginosos. A los pusilánimes  ("timidus es homo qui futura praevidere potest", que diría Patapalo) siempre nos quedarán atracciones del estilo de Les Petits Drakkars, un paseíto en barquitos como el de los desgraciados piratas de Barbarroja a los que echan a pique indefectiblemente  Astérix y Obélix. El parque ofrece también momentos divertidísimos como el pase de la película en 4D de Estudios Idéfix Attention Menhir!, que se proyecta en una sala con butacas dinámicas capaces de hacerte sentir que saltas, corres o te salpican la cara mientras de la pantalla emerge de forma tan real uno de los megalitos lanzados por Obélix que hace que te agaches para que no te aplaste...

La reconstrucción de la aldea gala es encantadora, puedes deambular por ella  y visitar las casas de los principales personajes. La visita al parque con el último libro (el 39), Astérix tras las huellas del grifo, bajo el brazo tiene la gracia de que, aunque has de ir bien abrigado, te parece que hace menos frío: la historia, muy buena, de Jean-Yves Ferri y Didier Conrad transcurre en las nevadas y gélidas tierras de los sármatas, en los confines del Barbicarum...

El parque que ocupa 80 hectáreas (34 del recinto propiamente dicho, 26 del aparcamiento y 20 de los tres hoteles del complejo) funciona desde hace 32 años en los que no ha parado de evolucionar y ampliarse, y en el curso de los cuales ha atraído a más de 50 millones de visitantes. Paradójicamente, el Parque Astérix, el segundo de Francia en importancia tras Disneyland París, es poco conocido en España, pese a que los españoles se cuentan entre los mayores lectores de los álbumes de los célebres galos, por detrás de los franceses y los alemanes.

Uno de los objetivos de la dirección del recinto es conseguir que acudan más visitantes de nuestro país en el convencimiento, según expresa el director adjunto de la explotación del parque, Sébastien Retailleau, de que reúne atractivos de sobra para conseguirlo. A tal efecto se han conjurado como "aliados estratégicos" el Parque Astérix, la editorial Salvat, editora en España de las aventuras de los galos, y Renfe-SNCF en cooperación, que llevan viajeros en alta velocidad de Barcelona a la Gare de Lyon de París (desde donde hay lanzaderas)...

Jacinto Antón. París. El País, viernes 24 de diciembre de 2021.

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