Niños con puños en alto y rostros inflamados de orgullo y miedo, desfiles en México con banderas mexicanas y de la República española, Pasionaria bajando en trineo por una ladera nevada, el lendakari José Antonio Aguirre trabajando, el presidente d ela Generalitat Lluís Companys tumbado en un sofá en sunexilio francés, el entierro de largo Caballero en el cementerio parisiense de Père Lachaise en 1946, una paella cocinada en un campo invernal...Esa España existió, y vivió en los cinco continentes, mientras el dictador Francisco Franco se enrocaba en la España geográfica. De aquel exilio republicano quedan numerosas grabaciones caseras, y con ellas la cineasta e investigadora Irene Gutiérrez ha realizado el documental de creación Diarios del exilio, promovido por Filmoteca Española, que se proyecta esta noche en Madrid en la institución fílmica como conmemoración del día mundial del patrimonio audiovisual.
Diarios del exilio, mediometraje de 40 minutos, no levanta acta de aquel exilio ni realiza una exploración histórica al uso. Gutiérrez ha utilizado el material para sumergir al espectador en una atmósfera de "no lugar", remarcada por la banda sonora de Cristóbal Fernández (montador de las películas de Oliver Laxe y codirector de Mudar de piel ), una España que vivió luchando por las libertades y porque no fuera olvidada. "De todo el marerial disonible", recuerda la cineasta, "al final hemos usado una docena de colecciones, datadas entre 1937 y 1977, buscando un equilibrio entre loa actos políticos, oficiales, con la vida diaria de los exiliados"...
Gregorio Belinchón. Madrid. El País, domingo 27 de octubre de 2019
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